Por el partido de ida para evitar la Promoción, el Lobo logró en San Juan, salir de una parada brava, lo menos lastimado posible.
Con un plantel diezmado, por las sanciones de algunos jugadores, y compromisos sociales por otro, Sportivo perdió por la mínima, ante un Juventud Alianza, que aunque mostró algunos jugadores interesantes, no es un rival imposible de vencer.
En el primer tiempo, el equipo local, copó la parada en el centro de la cancha, pero no de forma ordenada, llegaba al arco defendido por el seguro Monti, a través de centros por ambas puntas.
El Lobo careció de poder ofensivo, y solo llegaba a preocupar a su rival, a través de pelotas paradas.
El único gol del partido, llegó a o 40 minutos, tras un fuerte remate de Garipe, gran tapada de Monti, y de rebote Del Castillo, la mandó al fondo del arco.
En el segundo tiempo, se esperaba una estampida del equipo local, tratando de aumentar la diferencia, pero no fue así. El equipo Sanjuanino se notó precabido, tratando de no entrar en desesperación, y quedar expuesto en la defensa. Ya los laterales no pasaron tanto al ataque, y aunque siguieron generando situaciones, con el correr de los minutos, en el aire se percibía que ambos equipos estaban conformes con el resultado.
A los 90 minutos del complemento, se paralizó el estadio, en lo que fué la jugada de máximo peligro a favor de Sportivo, con un centro razante desde la derecha, la pelota pasó entre varias piernas, y un defectuoso despeje del lateral derecho, casi termina en gol.
Al término del partido, la parcialidad local despidió con tibios aplausos a su equipo, que trataron de reforzar, con un par de bombas de estruendo.
Mientras que por el lado de Sportivo, no se vieron caras de procupación, sinó, todo lo contrrio,porque el equipo sintió que la situación se puede revertir en casa, dentro de 7 días.